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“Can I have a brownie?” “Just one more cookie, please?” “All I want is one more piece of candy!”
Do these sentences sound familiar? You’ve probably heard questions like these a lot from your kids. While it’s fun to treat your kids to something sweet occasionally, there comes a point where there is too much of a good thing. It’s important to encourage healthy eating habits in your kids starting at a young age. Doing this will not only help them keep a healthy weight, but it will help them maintain a healthier lifestyle as they head into adulthood. Here are some tips on how you can encourage your kids to eat well.
#1: Model good behavior.
As a parent or a nanny, your children look up to you. So, show them how to eat a well-balanced diet. For instance, integrate lots of fruits and vegetables into their daily routine and let them see you eating the same things. Or, if you want to teach your kids to be adventurous eaters, model what this looks like. If you have never tried a food, let them explore that with you. Your kids often mimic what they see, so if they see you enjoying healthy foods, chances are, they will be more open to eating and enjoying it, too.
#2: Give them input.
It might take a little longer at the grocery store if you take your kids along with you but doing this, you can give them input on what healthy items to buy. This gives them a sense of control in the process and teaches them the importance of making good, health-conscious decisions. Talk to them about which healthy foods are options at the store and then when you get home, let them have some input on picking out a new recipe to try.
#3: Cook with them.
Kids at all ages can help in the kitchen! While your preschool-age child might not be able to help with the major stuff, they can help wash the fruits and veggies or help tear up lettuce for a salad. For older kids, they can help measure ingredients, chop ingredients, or stir things on the stovetop. Encouraging kids to get involved in the kitchen is an important life skill to teach. Culinary familiarity will give them the tools they need later when they want to create a healthy meal for themselves or for the whole family.
#4: Start a garden.
What better way to get your kids excited about healthy food than to have them plant a seed, nourish it, then see it all done and ready to eat? Planting a small garden – or even just planting one vegetable in a large pot – teaches patience, too! Not to mention, they will be excited about tasting the food that they worked hard to produce.
#5: Be patient.
Introduce your kids to healthy foods as often as you can. But be patient and try not to push too hard. Doing this could create negative feelings of resentment or anger and cause them to resist eating the foods that you’ve been working hard to teach them to enjoy.
With some creativity and guidance, your kids can become healthy eaters that love experiencing a variety of different foods! And the reward of seeing your child healthy and happy is a gift in and of itself.
Cómo fomentar hábitos alimenticios saludables en los niños
“¿Me das un brownie?” “¿Sólo una galleta más, por favor?” “¡Sólo quiero un trozo más de caramelo”.¿
Te suenan estas frases? Seguramente habrás oído muchas veces preguntas como éstas de tus pequeños. Aunque es divertido darles un capricho a tus niños de vez en cuando, llega un momento en el que todo en exceso no es bueno. Es importante fomentar hábitos alimenticios saludables en tus hijos desde una edad temprana. Esto no sólo les ayudará a mantener un peso saludable, sino que también les ayudará a mantener un estilo de vida más sano a medida que vayan creciendo y durante el resto de su vida adulta. Estos son algunos consejos para poder animar a sus hijos a comer bien.
#1: Modele un buen comportamiento.
Como padre o madre, tus hijos te admiran. Así que enséñeles a llevar una dieta equilibrada. Por ejemplo, integra muchas frutas y verduras en su rutina diaria y deja que te vean comiendo lo mismo. Que te vean comer lo mismo. O, si quieres enseñar a tus hijos a ser comedores aventureros, modela de lo que es esto. Si nunca han probado un alimento, deja que lo exploren contigo. Tus hijos suelen imitar lo que ven, así que si te ven disfrutar de alimentos sanos, lo más probable es que estén más dispuestos a comer y disfrutar de ellos.
#2: Dales tu opinión.
Puede que tardes un poco más en ir al supermercado si llevas a tus hijos contigo, pero haciendolo, puedes darles tu opinión sobre los productos saludables que debes comprar. Esto les da un sentido de control en el proceso y les enseña la importancia de tomar decisiones buenas y saludables. Habla con ellos de los alimentos saludables que hay en la tienda y, al llegar a casa, permíteles que que opinen sobre la elección de una nueva receta para probar.
#3: Cocina con ellos.
Los niños de todas las edades pueden ayudar en la cocina. Aunque tu hijo en edad preescolar no pueda ayudar a lavar la fruta y la verdura o a cortar la lechuga para la ensalada. En el caso de los niños mayores, pueden ayudar a medir los ingredientes, a picarlos o a removerlos en la cocina. Animar a los niños a participar en la cocina es una importante habilidad para la vida. La familiaridad con la cocina les dará las herramientas que necesitarán más adelante cuando quieran crear una comida saludable para ellos mismos o para toda la familia.
#4: Monta un huerto.
Qué mejor manera de entusiasmar a tus hijos con la comida sana que hacerles plantar una semilla, nutrirla, y luego verla hecha y lista para comer? Plantar un pequeño huerto -o incluso sólo plantar una hortaliza en una maceta grande, ¡también enseña a tener paciencia! Por no hablar de que les entusiasmará probar los alimentos que han producido con tanto esfuerzo.
#5: Tenga paciencia.
Presenta a tus hijos alimentos saludables tan a menudo como puedas. Pero sea paciente y trate de no presionar demasiado. Hacerlo podría crear sentimientos negativos de resentimiento o enfado y hacer que se resistan a comer los alimentos que usted se ha esforzado en enseñarles a disfrutar. Con un poco de creatividad y orientación, tus hijos pueden convertirse en comedores sanos a los que les encanta probar variedad de alimentos diferentes. Y la recompensa de ver a tu hijo sano y feliz es un regalo en sí mismo.