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Take mini breaks.
It is important to use your paid time off. Whether it’s just a day here and there or using a few days at a time, these breaks will refresh and re-energize you. And just like those days are crucial for revitalization, so are taking mini breaks throughout the workday. These small breaks help alleviate stress and keep you focused. Find a place where you can be alone for five or ten minutes. During these small break times, relax your jaw, neck and shoulders. Close your eyes, take a deep breath, and have a healthy snack. Some other relaxing ideas you can try include reading a chapter of a book, calling a friend for a short visit, watching a funny movie clip, or working on a crossword puzzle.
Don’t stuff your feelings.
Being a caregiver is a job that requires a lot of empathy, compassion, and patience. It’s a big job and you have real feelings. It is okay to let the kids you care for see your emotions. Talk with them if you’re feeling sad, happy, or somewhere in the middle. Showing your emotion shows them that it’s okay for them to show their emotions too. You can use those times as teachable moments, where you can open the lines of communication and share with them the importance of not hiding your feelings.
Build up your support system.
Now more than ever, it’s important to stay connected with other people. Building a strong network of people that love, trust, and support you is key to making it through any difficult day. Reach out to these people regularly for talks or video calls. In addition, consider connecting with fellow nannies or caregivers who work in similar positions as you. This gives you an outlet to bond over shared difficulties and circumstances and provide encouragement to each other.
Respect yourself.
Part of maintaining good mental health is loving and respecting yourself. From day one, work on building a positive, respectful relationship with your employer. If you feel disrespected in any way, speak up. Make it clear that you won’t tolerate behavior like that. As a nanny, you are part of the family team that is working to raise healthy, well-balanced kids. All team members must feel respect to keep things running as smoothly as possible.
A good caregiver recognizes that taking care of themselves comes first. Without taking time to care for yourself, you are risking burnout and exhaustion, which contributes to poor mental health. Talk to your doctor if you are experiencing anxiety, depression, or if you simply need some tips to keep your mind engaged and boost your self-esteem. You are valuable and appreciated!
¿Cómo mantener la salud mental mientras se cuida a los demás?
Tómate pequeños descansos.
Es importante utilizar el tiempo libre remunerado. Ya sea un día aquí y otro allá o unos cuantos días a la vez, estos descansos te refrescarán y te llenarán de energía. Y al igual que esos días son cruciales para la revitalización, también lo son las minipausas a lo largo de la jornada laboral. Estos pequeños descansos ayudan a aliviar el estrés y a mantener la concentración. Encuentre un lugar donde pueda estar solo durante cinco o diez minutos. Durante estos pequeños descansos, relaja la mandíbula, el cuello y los hombros. Cierra los ojos, respira profundamente y toma un snack saludable. Otras ideas relajantes que puedes probar son leer un capítulo de un libro, llamar a un amigo para hacerle una pequeña visita, ver una película divertida o trabajar en un crucigrama.
No reprimas tus sentimientos.
Ser niñera es un trabajo que requiere mucha empatía, compasión y paciencia. Es un gran trabajo y tienes sentimientos reales. Está bien dejar que los niños a los que cuidas vean tus emociones. Habla con ellos si te sientes triste, feliz o en un punto intermedio. Mostrar tus emociones les muestra que está bien que ellos también muestren sus emociones. Puedes utilizar esos momentos como de comunicación y compartir con ellos la importancia de no ocultar los sentimientos.
Construye tu sistema de apoyo.
Ahora más que nunca, es importante estar conectado con otras personas. Construir una red sólida de personas que te quieren, confían en ti y te apoyan es la clave para superar cualquier día difícil. Acércate a estas personas con regularidad para hablar o hacer videollamadas. Además, considera la posibilidad de conectar con otras niñeras o cuidadores que trabajen en puestos similares a los tuyos. Esto te da una salida para compartir dificultades y circunstancias y animarse mutuamente.
Respétese a sí mismo.
Parte del mantenimiento de una buena salud mental es quererse y respetarse a uno mismo. Desde el primer día, trabaja en construir una relación positiva y respetuosa con tu empleador. Si te sientes irrespetado de alguna manera, habla de ello. Deja claro que no vas a tolerar ese tipo de comportamiento. Como niñera, eres parte del equipo familiar que trabaja para criar niños sanos y equilibrados. Todos los miembros del equipo deben sentirse respetados para que las cosas funcionen lo mejor posible.
Un buen cuidador reconoce que cuidar de sí mismo es lo primero. Si no se toma tiempo para cuidarse a sí mismo, corre el riesgo de agotarse, lo que contribuye a una mala salud mental. Hable con su médico si sufre ansiedad o depresión, o si simplemente necesita algunos consejos para mantener tu mente ocupada y aumentar tu autoestima. Usted es valioso y ¡apreciado!